En un comunicado, el organismo señaló que las aeronaves formaban parte de la flota de la Fuerza Aérea Mexicana.
EFE México
El Instituto para Devolver al Pueblo lo Robado (Indep) informó este domingo que logró obtener 89,8 millones de pesos (4,3 millones de dólares) por la venta de cinco aeronaves federales.
En un comunicado, el organismo señaló que las aeronaves formaban parte de la flota de la Fuerza Aérea Mexicana y alcanzaron un sobre precio de 53 % del valor de salida de éstas.
Ernesto Ortega, director general del Indep, explicó que las aeronaves fueron adquiridas por administraciones anteriores por lo que ahora son aviones y helicópteros “que son prescindibles”.
Además, dijo, generan costos de mantenimiento “que pueden ser canalizados a otros rubros”.
La dependencia detalló que en esta ocasión se recibieron 17 ofertas de compra en sobre cerrado. Y mediante este proceso, el Indep vendió las cinco aeronaves, cuatro helicópteros y un avión, en un total de poco más de 89,8 millones de pesos (4,3 millones de dólares).
Cuatro helicópteros Super Puma fueron vendidos a un empresario canadiense por más de 56,6 millones de pesos (2,73 millones de dólares).
En tanto que, el avión Boeing Company 737-322, año 1989, se vendió en 33,2 millones de pesos (1,6 millones de dólares).
Los ganadores tienen a más tardar el 22 de marzo para liquidar los precios de venta de los helicópteros y avión adquiridos.
Prieto Ortega agradeció a los participantes “la confianza que tienen en el Indep”, en el Gobierno de México y en la cuarta transformación.
De igual forma, exhortó a seguir participando en las subastas del instituto, y les pidió estar alertas, a fin de “evitar ser estafados y defraudados” a través de páginas que se dicen son del instituto.
El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, que asumió el poder con un férreo discurso contra la corrupción, transformó el hasta entonces Sistema de Administración y Enajenación de Bienes (SAE) en el Instituto para Devolver al Pueblo lo Robado (Indep).
Desde entonces, este instituto ha llevado a cabo subastas de bienes de lujo confiscados y, según el Gobierno, el dinero recaudado con estas pujas se ha destinado a programas sociales.